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En Nuevo Laredo, existe una tradición histórica que es central para las expresiones públicas de identidad cívica de su frontera. Es la historia de cómo, en 1848, cuando México perdió el pequeño pueblo de Laredo ante los Estados Unidos debido a la firma del Tratado de Guadalupe Hidalgo, muchos de sus habitantes abandonaron sus hogares y emigraron al otro lado del río Bravo, donde fundaron un asentamiento al que llamaron Nuevo Laredo en memoria de su hogar perdido. La tradición agrega que desenterraron a sus muertos, trasladaron sus restos al otro lado del río y los volvieron a enterrar en Nuevo Laredo para que no yacieran en territorio extranjero.
Hasta el día de hoy, los Laredos comparten más que su nombre. El comercio interdependiente que define su futuro y los ricos lazos históricos caracterizan el círculo de influencia que ambos representan el aporte comercial al PBI de cada uno de sus países.
Actualmente, Nuevo Laredo es reconocido como un fuerte antebrazo de México con infraestructura de transporte, experiencia en logística, diversidad de puertos de entrada, riqueza energética, comercio de maquila laborioso, clima estable y proximidad geográfica para el crecimiento. El flujo comercial de la república mexicana depende directamente del envío hacia el norte a Nuevo Laredo para luego ser importado y distribuido desde Texas al resto de los Estados Unidos.
La región de Laredos alberga $205,900 millones en comercio anual y aporta $14,000 millones en el producto interno bruto junto con 2,32 millones de camiones en dirección norte que se manejan. Por lo tanto, México se ha posicionado como el mercado de exportación e importación #1 de Texas. En comparación con los $524,230 millones de comercio de Texas con el resto del mundo, México aporta el 34% con $177,240 millones. Las industrias comerciales abarcan la electrónica, los combustibles fósiles, la automoción, los plásticos y el hierro para satisfacer la demanda actual.
Todo el mundo ama la competencia sana, y como México tiene muchos puertos de entrada dinámicos para el comercio internacional, esta rivalidad entre los estados mexicanos impulsa la innovación y el aumento de la producción al crecimiento anual. La cooperación económica transfronteriza histórica garantiza el crecimiento y desarrollo de ambas ciudades, ya que México ha demostrado ofrecer apertura comercial para la actividad comercial y los puertos estadounidenses. Con clientes sofisticados en EE. UU. y clústeres de fabricación en suelo mexicano, establece un ciclo virtuoso para que las empresas se expandan con instalaciones gubernamentales para producir de manera rentable.
Con la ubicación estratégica en la frontera entre EE. UU. y México y la infraestructura de transporte construida y mantenida para continuar impulsando el próspero sector de manufactura y transporte. El continuo crecimiento del que muchas generaciones han sido testigos y partícipes, ha permitido contar con un capital humano altamente especializado en logística y transporte.
Nuestros equipos de cumplimiento aduanero y expertos en logística integradora han puesto nuestra experiencia a su alcance en el círculo de influencia de Laredo y valoran todos los factores contribuyentes que apalancan el comercio internacional. ¡Encuentre orientación para transformar las operaciones de su cadena de suministro y el tiempo de procesamiento aduanero en ventajas rentables y competitivas!
